El concejal de la ciudad de Bogotá, en Colombia, Álvaro Argote, envió una misiva a la alcaldesa Clara López Obregón en la que habla de la importancia del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP) y de soluciones inmediatas para mejorar el servicio de Transmilenio.
Argote expresó su preocupación por el funcionamiento del sistema masivo de transporte y dijo que el sistema requiere unos ajustes urgentes a efecto de evitar un colapso que afectaría la vida de la ciudad.
“Hoy en la operación de Transmilenio se viene registrando un sobrecupo de alrededor de 100 mil pasajeros lo cual origina alto riesgo y mal servicio para los usuarios”, afirma la misiva.
Según el cabildante, “hay unas condiciones del
maltrato a los trabajadores que origina un ambiente laboral injusto y es
causante también de los riesgos en la operación, todo lo anterior en
detrimento de las onerosas condiciones de la concesión que bien vale la
pena que sean revisadas. Respetuosamente, he propuesto que con la
urgencia de la actual situación que Transmilenio demanda, se convoque
una Mesa de Concertación a la cual concurran los actores de este
conflicto, a saber, el gobierno distrital, los trabajadores, los
usuarios y los operadores. Este conflicto igual que la prevención a las
negativas consecuencias de la presente ola invernal requieren un
tratamiento que puede evitar lo previsible”.
Por otra parte, el cabildante puntualiza en la carta que las tarifas del
SITP no deben afectar a los más pobres y que por el contrario deben ser
equilibradas.
“Siempre he tenido preocupación por el buen funcionamiento del
transporte público en la ciudad, entendiendo que es un derecho público y
una necesidad imperativa de la inmensa mayoría de los sectores
populares. En este sentido, he defendido siempre la modernización del
sistema teniendo en cuenta dos variables fundamentales: en primer lugar,
el servicio con alto contenido social sin afectar negativamente la
carga económica en la canasta familiar de los más pobres”.
Argote señala que con la implementación del SITP pueden ajustarse
indebidamente las tarifas del transporte público, por tal razón, le
pidió a la alcaldesa estar muy pendiente de esos ajustes para que la
población vulnerable no vaya a resultar perjudicada.
Asimismo, el concejal indicó que la inclusión en la operación del SITP
de propietarios del parque automotor, que le han prestado un servicio a
la ciudad, es importante, “pero no pueden ser desplazados por el
monopolio de esta actividad económica”.
Un nuevo estudio de demanda de pasajeros contratado por la
Administración Distrital con la firma Steer Davies Gleave, para conocer
cuál es la ruta que más le conviene a Bogotá para la construcción de la
primera línea del Metro, coincidió con el estudio realizado por Sener
Transporte Metropolitano de Barcelona, que desde un principio señaló que
el sistema masivo de transporte debería circular por el borde oriental
de la capital.
Aunque la alcaldía de Bogotá no ha revelado mayores detalles del
estudio, el análisis dice que la primera línea del Metro debería
comenzar en el Portal de Las Américas y terminar en la calle 127 ó 170
con carrera Novena.
De acuerdo al estudio hecho por Sener, serían 24 kilómetros: 15
subterráneos y 9 superficiales. Del Portal de Las Américas, vía
subterránea, se extendería hasta la Avenida 1º de Mayo con carrera 68,
donde saldría a la superficie y se desplazaría por el trazado de la
actual vía férrea hasta la Estación de la Sabana. En dicha estación
continuará su recorrido por debajo de tierra y llegará finalmente a la
calle 127 ó 170 con Novena.
Actualmente, los estudios de ingeniería de detalle no han sido
contratados debido a los reparos que surgieron en el Gobierno Nacional
por el trazado de la primera línea. Esos estudios tienen un costo de 40
millones de dólares. El pasado 22 de julio, el ministro de Transporte,
Germán Cardona, dijo que le parece absurdo invertir esos recursos sin
tener nuevo alcalde.
En la ingeniera básica se elaborarán borradores de planos, además se
realizarán operaciones geotécnicas en donde se harán perforaciones cada
40 metros a lo largo del trazado para mirar la calidad del suelo y poder
prever y planear los riesgos geológicos.
El estudio de suelo busca evitar mayores costos de la obra, pues el
hecho de que una enorme piedra apareciera en el camino no sólo
interrumpiría el cronograma del megaproyecto, sino que implicaría la
inyección de más recursos.
La primera línea del metro tendría 40 trenes,
36 habilitados para funcionar constantemente y cuatro de reserva. Cada
tren, de 2,80 metros de ancho, tendrá siete vagones y cabrán 6 ó 7
personas por metro cuadrado.
En el trazado, que se extiende desde el Portal de las Américas en el
suroccidente de la ciudad, hasta la carrera Novena con calle 127 en el
norte, habría 27 estaciones.
Los 15 kilómetros subterráneos se construirían con una profundidad de 20 metros.
La primera línea del Metro tendría un costo aproximado de US$1.920 millones.
Comentario:
La ciudad de Bogota, colapsada con un servicio de buses que intenta de
mil manera reemplazar un servicio de trenes, ahora envuelto en esta
parodia.
tanto le criticaron el "socialismo" de Moreno y su tren de 2 mil millones de dolares, y ahora la gente de Santos va por el tren
...
ES QUE SIMPLEMENTE NO HAY OTRA. El sistema troncal NUNCA DEBIO SER CON BUSES....eso es un error como el que se va a cometer en la ciudad de Lima con la Linea 2 del Metropolitano.
Les parece familiar??? Igualito al Metropolitano
en hora punta?? Y eso que el Metropolitano aun no esta lideando con los
700 mil que deberia tener, se imaginan las colas si el publico crece en
120%???? Esa es la demanda real que le pusieron al Metropolitano....
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